martes, 29 de julio de 2008

Poesía

Buenas. Otra vez estoy aquí para exponer otra de mis poesias de antaño. En general no suelen ser muy alegres (ya lo habreis comprobado), incluso en una ocasión una muy buena amiga del colegio me dijo que cuanto más triste estaba mejor me salían. Por eso he intentado hacer alguna un poco más alegre, para que haya un poco de todo. Además, yo no soy una persona tan triste como parece, sino lo contrario. Soy de las que ven la "botella medio llena".
La de hoy refleja lo que sentía sobre los problemas que pasaba por entonces Afganistán. Era sobre el 2002 más o menos. Todo el mundo estaba muerto de miedo por una posible tercera guerra mundial... yo también.

Afganistán

Sol, tierra, aire,
un pais devastado por la guerra,
un pais de hambre.

Calor, polvo, viento,
y un sudor que recorre por tu piel
y te come por dentro.

Miseria, armas, fuego
y un sinfín de normas absurdas,
una vida de infierno.

Eso es la guerra:
hombres, mujeres, niños y abuelos,
pobres inocentes que no tienen futuro,
que anhelan un cielo prometido,
que viven llorando sus muertos.
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